Luiz Inácio Lula da Silva, el presidente de Brasil, finalmente aprobó la ley de apuestas deportivas, no sin antes vetar algunas partes del proyecto. El Senado y la Cámara de Diputados recibieron la firma del mandatario para el nuevo proyecto de ley PL3626/23, que establece el marco regulatorio para las apuestas, no sólo en los recintos deportivos, sino también en los casinos online.
El proyecto de ley PL3626/23, aprobado el 22 de diciembre por la Cámara de Diputados, sufrió varias modificaciones realizadas por el Senado y, finalmente, en los primeros días de 2024, el presidente de Brasil, Lula da Silva, dio luz verde, no sin antes sancionar y modificar algunos puntos de esta nueva ley 14.790.
Originalmente, cuando se presentó el proyecto, uno de los cambios radicales y sorprendentes fue que se dejaría de lado a los casinos online para centrarse 100% en el mercado de las apuestas deportivas. La gran sorpresa fue que, al final, aunque este marco regulatorio se centra exclusivamente en las apuestas deportivas, también incluye las realizadas en los casinos online.
El veto establecido por Lula da Silva se refiere a los pagos de facturación que deben realizar las empresas interesadas en ofrecer servicios de apuestas deportivas en el país. El monto total hasta el momento es del 12% basado en los ingresos totales de la empresa, es decir, las ganancias.
Además, se estableció que los jugadores y usuarios deberán renunciar al 15% del valor neto de los premios que reciban a lo largo de un año, siempre que superen los R$ 2.112, (aproximadamente US$430).
El valor nominal establecido al inicio del proyecto se proponía un 18% para las empresas y un increíble 30% para jugadores y usuarios. Esta cifra se redujo gracias a las negociaciones y al proceso previo a la aceptación de esta nueva ley.
Todos los operadores, sin excepción, deberán seguir y cumplir una serie de requisitos para operar de forma legal y segura en territorio brasileño. Entre los requisitos más importantes destaca que las empresas deben contar con autorización gubernamental y tener sede física dentro del país.
Además, deben tener un socio brasileño, es decir, una empresa nacional que trabaje junto con ellos, y siempre deben tener al menos el 20% del capital social. Finalmente, el casino online o casa de apuestas deberá pagar una tarifa de R$30.000.000 (US$6.000.000 aprox.) para obtener la licencia, que tendrá una validez de 5 años.
Y aún hay más…
También se especifican los lineamientos a seguir en materia de juego responsable, publicidad, métodos de verificación de usuarios y las sanciones en caso de incumplimiento de cualquiera de los estatutos mencionados en la nueva ley.
Otro aspecto que también se dio a conocer es la forma en que el gobierno distribuirá los recursos que se obtengan a través de esta ley; el Ministerio de Deportes, Turismo, Seguridad Pública, Educación, Seguridad Social y Salud será el más beneficiado.
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