En el contexto del póker, la preparación puede significar un número de distintas cosas, pero nos concentraremos específicamente en unas pocas instancias aquí.
Primero, veremos como prepararnos y sus ventajas cuando hacemos una apuesta o una subida. Segundo, expandiremos esto a todas las decisiones de apuestas. Finalmente, le echaremos una mirada a la preparación de nuestras sesiones en un sentido mucho más general. La preparación es un tema relativamente simple, que podemos derivar en temas más complejos, así que es un buen lugar para comenzar.
Comenzaremos nuestra discusión de la preparación en un ambiente pequeño que podemos más o menos controlar: simplemente una decisión de apuesta agresiva.
Tommy Angelo usa un gran ejemplo cuando habla acerca de la idea de la anticipación: en un pozo heads-up, cuando apuestas o subes, tu oponente puede solo retirarse, pagar o subir. Si se retira, tu próxima decisión de apuesta será en la próxima mano. Si paga, tu próxima decisión de apuesta será en la próxima calle. Si sube, y solo si sube, debes actuar ahora.
Eso es porque, cuando apuestas o subes, no hay nada estratégico para anticipar excepto una subida, y por eso, si no has anticipado una subida, no solo habrás cometido un error, habrás cometido el único error posible.
El objetivo del Sr. Angelo aquí es ayudar a evitar cualquier ansiedad u otra emoción que se activa cuando nos suben inesperadamente. Si decidimos qué hacer cuando nos suben antes de entrar en ese tipo de ansiedad y podemos aferrarnos a esa decisión, entonces estaremos ganando inmediatamente. Este simple ejemplo muestra la relación entre la preparación estratégica y los beneficios psicológicos.
Normalmente, hacemos una evaluación o algún análisis, y como resultado obtenemos lo que creemos que es la elección apropiada al enfrentar una decisión. A menudo habrán series de eventos como resultado de nuestra elección que nos pueden crear problemas psicológicos.
Cuando tenemos problemas psicológicos, nuestra habilidad para hacer evaluaciones y análisis sufre, así que queremos evitar tener que tomar decisiones bajo ese estrés. Lo hacemos tomando nuestras decisiones ante esas situaciones potencialmente estresantes por adelantado.
En el ejemplo mencionado previamente, si nos suben, entonces nos pueden poner bajo alguna presión (no importa de que tamaño), que nos afectará al tomar decisiones. Por lo tanto, el acto de preparar nuestra decisión planeando por adelantado para las variaciones más estresantes es claramente rentable, con el beneficio de evitar estrés innecesario.
Nuestro tema general al preparar una decisión es mirar adelante hacia las situaciones más estresantes que pueden suceder, y decidir que haremos en caso de que esas situaciones se den. El ejemplo previo cubre el caso en el que estemos apostando o subiendo pero, ¿Qué sucede con las decisiones con los otros tipos de apuestas (o no)? Si pasamos heads-up, nos deberíamos ir preparando para el caso en que nuestro oponente nos apueste. Sin embargo, también podríamos pensar por adelantado en que pasaría si nuestro oponente también pasa, y ciertas cartas salen en la próxima calle (si hay alguna).
También podemos anticipar diferentes tamaños de apuestas al prepararnos para una apuesta, subida, etc si estamos jugando un juego de apuestas grandes.
Para aquellos con problemas de tilt, podemos preparar otras decisiones también. Supone que estamos en el river enfrentando una apuesta, y vamos a preparar nuestra decisión para pagar. Pensamos en el resultado más estresante posible al pagar, y planeamos que haremos. Digamos que pagamos y nuestro oponente nos muestra una mano y nos damos cuenta que nos pago dos apuestas del tamaño del bote, y consiguió una carta milagrosa en el river y finalmente ganó.
Podemos prepararnos para este posible resultado, pensando en que si ese es el resultado, entonces jugó la mano de una manera muy poco rentable, y en realidad queremos que juegue de esa manera.
Cuando preparamos una decisión específica, es bastante claro que debemos por lo menos considerar las potenciales maneras que son estresantes en las que las cosas se pueden dar. Si queremos ser un poco más generales, podemos encontrar maneras para prepararnos para situaciones que tienen el potencial para ser estresantes, incluso si no sabemos específicamente por qué.
Como ejemplo, las sesiones de póker contienen potencialmente momentos estresantes, así que podríamos prepararnos para nuestras sesiones tomándonos unos pocos minutos para despejar nuestra mente antes de sentarnos a jugar. Esto puede hacerse saliendo a caminar, escuchando música, meditando, etc.
Con esta estructura en mente, podemos ir más allá del póker y aplicar esto a nuestra vida cotidiana, anticipando y preparándonos para los momentos estresantes.