Podría decirse que es un aspecto crucial para tu rentabilidad a largo plazo es el Mental Game.
Se trata de manejar los interminables cambios de fortuna que seguramente encontrará. Si ya ha jugado al póker durante algún tiempo, sabe que puede ser una experiencia bastante frustrante, por decir lo menos.
El resultado de muchas situaciones simplemente está más allá de nuestro control, sin importar lo bien que juguemos. El factor suerte a corto plazo puede ser brutal y no hay forma de evitarlo. Si juegas al póker, perderás más de lo que considerarías “justo”.
Esto hará que se te olvide por completo de lo que has leído sobre póker, abandones las estrategias probadas y verdaderas, y sigas las perdedoras, con acumules aún más pérdidas, hasta que pierdas la calma y rompas tu computadora portátil.
Exagero por el efecto, pero sucede. Se llama tilt y es la pesadilla de todos los jugadores de póker sobre la faz de la tierra. Nadie es completamente inmune a ella.
Ahora, no estoy diciendo esto para desanimarlos. Lo digo para hacerte saber que mantener tus emociones bajo control es tan importante, si no más, que aprender qué manos jugar en qué posición.
El póker es un juego en el que participamos los humanos, y nosotros, estamos trágicamente mal equipados para lidiar con las probabilidades.
Estamos hechos para actuar emocionalmente primero y pensar en las consecuencias solo después de que sea demasiado tarde. Las cosas saldrán mal y no reaccionarás tan bien como esperabas.
Así que estate atento a esto. Sepa que tendrás que trabajar en tu juego mental, así como en tu conocimiento técnico para realmente salir adelante.
Por eso la selección de juegos es tan importante. Solo debes jugar en juegos que puedas vencer y con el dinero que puedas permitirte perder.
Suena descaradamente obvio, pero te sorprendería saber cuántas personas ignoran algo que debería ser de sentido común.
Entonces, si tomas en serio todos estos consejos, estarás muy por delante de la curva de aprendizaje.
